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| Ornamento del triforio (y emblema de la Fundación) |
"Abierto por obras" es una magnífica iniciativa de la
Fundación Catedral Santa María (de Vitoria) y una parada necesaria para los amantes de las catedrales; aunque por el tiempo que lleva en marcha, es ya más un "debe" urgente.
Cuánto desearíamos algunos que el planteamiento de Santa María de Vitoria resultase contagioso y fuesen más los edificios históricos y singulares que ofreciesen acceso a sus entrañas. Bravo pues por la Fundación y su comprensión innovadora de lo que es el uso y el conocimiento de estos espacios, perfectamente explicados
en este excelente video de su Director Gerente, Juan Ignacio Lasagabaster.
Todas mis imágenes (32) de Santa María de Vitoria.
Pero dejadme que os cuente ...
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| Mar, con el casco de protección |
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| Panorámica interior del acceso por el edificio de la calle de la Cuchillería |
Convenientemente pertrechados con casco obrero se accede a la catedral por el subsuelo, a través de una apertura en los muros, de dos metros de espesor. El acceso a esta zona se realiza por los edificios anexos, situados en la calle de la Cuchillería, empleando una bella escalera de madera que salva la distancia entre la calle y este "neo-sótano" de la catedral. Esta planta, donde se intervino para acceder a los cimientos y a la propia estructura de la edificación, se acondiciona ahora como área museística.
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| Subterráneo en proceso de acondicionado |
El "nexo" entre esta planta inferior y la base de la iglesia es la "bóveda plana" que se está construyendo en el cruce de la nave central con el transepto: bóveda plana (prácticamente plana) por su parte inferior y suelo del altar por su parte superior. La bóveda se está realizando con grandes sillares con más de 1 metro de espesor en la periferia de la bóveda.
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| Vista de la nave principal |
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| Detalle de los sillares y del armazón de la bóveda plana |
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| Perspectiva de la zona del altar y detalle del progreso de la bóveda |
El edificio de la catedral tiene zonas muy deterioradas: muros rasgados; columnas torcidas. La presencia de "arcos del miedo" delata que estos problemas ya comenzaron a insinuarse hace tiempo. El tipo de piedra empleado en su construcción no parece el más adecuado para los mayores alardes góticos.
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| Ejemplo de los daños del edificio y "arco del miedo" |
La visita a la catedral continúa, más arriba, por estrechos pasillos y galerías hasta llegar a uno de los puntos más emblemáticos - al menos para mi: la tribuna del triforio.
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| Mar caminando por galerías y pasadizos |
El acceso al triforio ofrece una perspectiva completamente diferente de la catedral. Una localización inusual para los visitantes modernos de estos edificios. Centrados en la nave, justo por debajo del claristorio y por encima, en este caso, de los múltiples arcos del miedo, la perspectiva del edificio cambia radicalmente.
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| Vista desde el triforio |
Desde el triforio accedimos al espacio situado encima del pórtico de Santa María, una zona que ahora también se pretende recuperar.
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| Sala encima del pórtico (1) |
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| Sala encima del pórtico (2) |
A través de esta zona se llega a la base de la torre de la catedral. El acceso a los primeros niveles de la torre ha sido ya reacondicionado. En su interior nos encontramos con una espectacular escalera de acero y roble que hace palidecer a la que nos recibió en la entrada de la catedral.
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| Nueva escalera de acceso a la torre (1) |
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| Nueva escalera de acceso a la torre (2) |
La "nueva" escalera simplemente nos acerca al punto en el que hemos de proseguir la ascensión por la "vieja" escalera, no menos encantadora pero bastante más intimidante.
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| Vieja escalera de acceso a la torre |
Bajando de la torre, la visita a esta catedral en obras termina en el pórtico.
Y todo ello acompañado por las amables y precisas explicaciones de nuestra guía:
Ibabe Goikoetxea; atenta a las dudas y cargando en todo momento con planos, esquemas y fotografías con los que hacer aun más claras sus palabras.
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| Vista general (180º) del Pórtico |
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| Puerta principal y techumbre |
La conexión de la catedral de Vitoria con
Ken Follet es la "guinda" de este pastel gótico: el conocimiento de la catedral y de su proceso de restauración supuso una fuente de inspiración para "
Un mundo sin fin", tal como recoge el propio autor en los agradecimientos de su obra.
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| Estatua de Ken Follet (y una "fan") |
